Las magistradas del Tribunal Superior de Apelaciones del Primer Distrito Judicial decidieron cambiar la suerte de Anyuri Villarreal, de 37 años, vinculada a la Operación Jericó.A Villarreal se le imputaron cargos de blanqueo de capitales y conspiración para delitos relacionados con droga, luego de entregarse a las autoridades luego de aparecer en la lista de los más buscados. El defensor particular de la acusada, Adrián Calderón, anunció que apelará la decisión en una nueva audiencia fijada para el próximo 9 de septiembre.Omaira Jaramillo, Donaji Arosemena y Nidia Cantillo revocaron la detención provisional impuesta por una jueza de garantías y le concedieron casa por cárcel, con la prohibición de salir del país y de comunicarse con sus cómplices.El fiscal Joseph Alan Díaz defendió la postura del Ministerio Público, mientras que Adrián Calderón luchó por la libertad de su clienta.Las magistradas valoraron los riesgos procesales y el impacto en la comunidad antes de tomar su decisión. La acusada seguirá bajo la lupa de la justicia.La detenida, presuntamente operaba como administradora de un taller en el que se alteraban vehículos con doble fondo para el transporte de sustancias ilícitas.Los fiscales detallaron cómo la mujer estaba vinculada a la incautación de un vehículo de doble fondo el 4 de septiembre de 2023 en Pacora, y a las operaciones para almacenar 600 paquetes de drogas en un taller en Juan Díaz entre el 2 y el 20 de octubre de 2023.Las escuchas telefónicas revelaron que la mujer también alertaba a su esposo, condenado por pandillerismo a 10 años de prisión, sobre su captura.
